Se filtra un documento que refleja la voluntad de muchos de los Estados Miembros de la Unión Europea de acceder de algún modo al contenido de los mensajes privados, como, por ejemplo, los intercambiados a través de WhatsApp o Signal, para así poder detectar el posible material ilegal que se encuentre en los mismos.
El documento en cuestión se trata de una consulta que envió el Consejo Europeo a los Estados Miembros, concretamente a 20 de ellos, para recabar las posiciones de los mismos en relación con el cifrado de extremo a extremo y la lucha contra el abuso sexual a menores que tiene lugar a través de distintos medios.
Se pone en relieve la posición de España, que, más allá de únicamente llevar a cabo un escaneo mínimo de los mensajes, se posiciona firmemente a favor de eliminar el cifrado de extremo a extremo.
Esta postura podría ser peligrosa ya que el cifrado de extremo a extremo es garante de los derechos fundamentales de los usuarios, de entre los que destaca inevitablemente el derecho a la protección de datos.