Un particular presentó una demanda de nulidad frente al Diseño de Orgatex alegando que no constituía un dibujo en el sentido del artículo 3 a) RDC y que carecía de novedad y carácter singular, siendo declarada la nulidad por la EUIPO e interponiendo Orgatex un recurso de apelación ante el Tribunal General.
El Tribunal General concluyó que es necesario que las vistas mostraran la apariencia de un producto único o unitario o de una parte de este, acuñando el término "principio de unicidad de diseño", estableciendo que, para el caso en concreto, los puntos de vista de representación aportados eran inconsistentes no permitiendo identificar claramente un solo diseño: colores diferentes, falta de las curvas de nivel…
En cuanto al “principio de interpretación favorable al titular” que alegaba Orgatex, haciendo referencia al considerando 24 del CDR, fue rechazado por el Tribunal al entender que dicha interpretación no se daba en los procedimientos de nulidad.